Los accidentes de coche forman parte de la vida. Pero cuando una persona muere como resultado de un accidente de coche, es un acontecimiento trágico y grave. Cuando esto ocurre, se llama a la policía para determinar las circunstancias del accidente. A veces la policía acusa al conductor de conducción temeraria. Si la policía o el fiscal creen que un conductor fue criminalmente negligente, ese conductor puede ser acusado de Homicidio Involuntario. Frecuentemente, el cargo de Homicidio Involuntario es presentado después de la investigación por la policía y los fiscales.
Un delito grave de clase 5 se castiga con una pena de prisión no inferior a un año ni superior a 10 años o, a discreción del jurado o del tribunal que juzgue el caso sin jurado, con el encarcelamiento durante no más de 12 meses y una multa no superior a 2.500 dólares, una de las dos cosas o ambas.
La existencia o no de negligencia criminal en un caso concreto viene determinada por los hechos. ¿Cuál fue el comportamiento al volante? ¿Qué semáforos o señales de tráfico hay en la zona para dirigir la conducción? ¿Cuáles eran las condiciones de la carretera? ¿Se encontraban los vehículos implicados en buen estado de funcionamiento? ¿Qué información contiene el Crash Data Recorder? ¿Qué puede decirnos el lugar del impacto del vehículo sobre el accidente? ¿Qué pruebas puede aportar la policía para demostrar que el conductor estaba distraído?
Si usted es acusado de Homicidio Involuntario, las respuestas a estas y otras preguntas deben ser examinadas por un abogado con experiencia. El conocimiento sobre cómo abordar los casos de Homicidio Involuntario viene de haberlos manejado. Como ex fiscal, Fitz ha procesado estos casos y entiende qué hechos y pruebas pueden ser importantes en su caso.
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